Valor predictivo del sitio de quemadura con relación a la violencia de género

Predictive Value of Burn Site in Relation to Gender-Based Violence

Dra. Cei, María G.*; Dra. Toneguzzo, Janina*; Dr. Fernández Coria, Rodrigo*; Dra. Taljame, Laura*; Dr. Talarn, Ariel A.**

*Staff de la Unidad de Quemados del Hospital de Emergencias Dr. Clemente Alvarez
**Jefe de Servicio de la Unidad de Quemados del Hospital de Emergencias Dr. Clemente Alvarez

Información de contacto:
Mail: guillerminacei@gmail.com
Teléfono: 3416368310

El presente trabajo fue presentado en el XX Congreso Argentino de Quemaduras el 26 de Septiembre de 2024 en Córdoba, Córdoba, Argentina.
Los autores no declaran conflictos de interés.


Resumen

Objetivo: Este estudio tiene como objetivo explorar y analizar la relación entre la violencia de género y las características de las quemaduras en los pacientes atendidos en la Unidad de Quemados del Hospital de Emergencias Dr. Clemente Álvarez. Se busca identificar patrones que puedan ayudar a mejorar el diagnóstico precoz y tratamiento de las víctimas de violencia de género.

Método: Se realizó un estudio de cohortes retrospectivo, comparando dos grupos: la cohorte A (pacientes con quemaduras por violencia de género) y la cohorte B (pacientes con quemaduras no relacionadas con violencia de género). Se analizaron variables como el sitio de la quemadura, la extensión, el mecanismo de lesión, la gravedad, y las complicaciones durante el tratamiento. La muestra incluyó 53 pacientes, con datos recogidos entre 2014 y la 2024.

Resultados: No se pudo establecer un modelo predictivo con las variables analizadas que  determine precozmente la violencia de género en el contexto de la quemadura. Se observó que las víctimas de violencia de género presentaron una mayor gravedad en sus quemaduras (grupos de gravedad III y IV) en comparación con las pacientes no expuestas a violencia de género. La cohorte de violencia de género también presentó una mayor asociación con combustibles como agente etiológico, aunque esta diferencia no alcanzó significancia estadística. Además, las complicaciones fueron más frecuentes en el grupo de violencia de género.

Conclusiones: Existe una clara asociación entre la gravedad de las quemaduras y la presencia de violencia de género, con una mayor prevalencia de quemaduras graves en este grupo. Sin embargo, las variables analizadas no fueron suficientes para predecir de manera confiable la violencia de género en los pacientes quemados. Es crucial mantener un alto índice de sospecha y mejorar los protocolos de atención para optimizar el diagnóstico y tratamiento de las víctimas.

Palabras clave: violencia de género, quemaduras, gravedad, modelo predictivo, salud pública.

Abstract

Objective: This study aims to explore and analyze the relationship between gender-based violence and the characteristics of burns in patients treated at the Burn Unit of the Hospital de Emergencias Dr. Clemente Álvarez. The goal is to identify patterns that can aid in improving the early diagnosis and treatment of victims of gender-based violence.

Method: A retrospective cohort study was conducted comparing two groups: Cohort A (patients with burns from gender-based violence) and Cohort B (patients with burns unrelated to gender-based violence). Variables such as burn site, extent, injury mechanism, severity, and treatment complications were analyzed. The sample included 53 patients, with data collected from 2014 to the present.

Results: It was not possible to establish a predictive with the analyzed variables that determines early gender violence in the context of the burn. Victims of gender-based violence had more severe burns (groups III and IV) compared to patients not exposed to violence. The gender-based violence cohort also showed a higher use of associated fuels, although this difference was not statistically significant. Additionally, complications were more frequent in the gender-based violence group.

Conclusions: There is a clear association between the severity of burns and the presence of gender-based violence, with a higher prevalence of severe burns in this group. However, the variables analyzed were insufficient to reliably predict gender-based violence in burn patients. Maintaining a high index of suspicion and improving care protocols is crucial for optimizing the diagnosis and treatment of victims.

Keywords: gender-based violence, burns, severity, predictive model, public health.

Introducción 

La violencia de género es un problema de salud pública mundial, afectando a una gran parte de la población en diferentes formas (1). Las quemaduras representan una carga considerable en la salud pública, y existe una intersección importante entre las quemaduras y la violencia de género, particularmente en casos de quemaduras intencionales como resultado de agresiones domésticas o de pareja (2). 

De acuerdo con el informe de la Línea 144 (3), entre enero y junio de 2023, se recibieron 49.679 comunicaciones por violencia de género en Argentina, con la mayoría de los casos reportados como violencia doméstica. Además, el 96% de las personas que se comunicaron fueron mujeres, y el 64% refirió haber padecido violencia física, lo que subraya la gravedad y prevalencia del problema en el país. 

La legislación argentina aborda la violencia de género con varias normativas claves, como la Ley N° 26.485, que busca proteger a las mujeres de todas las formas de violencia (4). Esta ley incorpora al Código Penal el femicidio como un agravante al homicidio, lo que refleja la seriedad con la que el marco legal argentino trata la violencia de género.  A nivel provincial en Santa Fe, está legislado por la Ley N° 13348/2013 (5) y a nivel de la Municipalidad de Rosario mediante ordenanzas municipales como la N° 8337 (6).

Abordar las quemaduras en el contexto de la violencia de género es crucial debido a las implicancias físicas, psicológicas y sociales que conllevan. Las víctimas de quemaduras intencionales requieren una atención integral que no sólo incluya el tratamiento de las heridas físicas, sino también un apoyo psicológico y legal que las ayude a superar el trauma y a navegar por el sistema judicial (7). En Argentina, a pesar de contar con un marco legal sólido que protege a las mujeres de la violencia de género, no se dispone de datos precisos sobre la prevalencia de quemaduras causadas por esta forma de violencia. La falta de estos datos resalta la importancia de ahondar en este tema, ya que sólo a través de una comprensión profunda y detallada de los casos existentes se pueden desarrollar protocolos de atención adecuados y se pueden establecer políticas de prevención efectivas. 

Objetivos 

  • Objetivo General: Explorar y analizar la relación entre la violencia de género y las características de las quemaduras en los pacientes atendidos en la Unidad de Quemados del Hospital de Emergencias Dr. Clemente Álvarez.
  • Objetivos Específicos:
  • Determinar el perfil demográfico y social de los pacientes quemados en contexto de violencia de género.
  • Describir y comparar los tipos de quemaduras, sus mecanismos y las áreas del cuerpo afectadas en los casos asociados y no asociados a violencia de género.
  • Evaluar la gravedad de las lesiones y complicaciones en ambos grupos.
  • Proponer mejoras en los protocolos de atención basadas en los hallazgos del estudio.

Materiales y Métodos

Diseño del Estudio

Este es un estudio de cohortes retrospectivo que analiza los pacientes ingresados a la Unidad de Quemados del Hospital de Emergencia Dr. Clemente Álvarez entre 2014 y la actualidad. El estudio tiene como objetivo comparar las características de las quemaduras en víctimas de violencia de género con las de pacientes que sufrieron quemaduras por otras causas, para identificar posibles patrones que permitan un alto índice de sospecha de violencia de género.

Población de Estudio

  • Cohorte A (Expuesta): Pacientes ingresados por quemaduras relacionadas con violencia de género desde 2014 hasta la actualidad (n=27).
  • Cohorte B (No expuesta): Pacientes ingresados por quemaduras no relacionadas con violencia de género.

Criterios de Inclusión

  • Pacientes mayores de 15 años ingresadas a la Unidad de Quemados.
  • Diagnóstico confirmado de quemaduras.
  • Para la Cohorte A: Caso sospechoso o confirmado de violencia de género como causa de la quemadura.
  • Para la Cohorte B: Causas de quemaduras no relacionadas con violencia de género.

Criterios de Exclusión

  • Pacientes con información incompleta o insuficiente en la historia clínica.
  • Casos en los que no se pudo determinar la causa exacta de la quemadura.

Variables del Estudio

  • Variables Principales:
    • Sitio de la Quemadura: Localización anatómica de la quemadura.
    • Extensión de la Quemadura: Porcentaje de superficie corporal quemada (SCQ).
    • Mecanismo de la Quemadura: Tipo de agente causante
    • Grupo Etario: Edad de las pacientes.
  • Variables Secundarias:
    • Tiempo de hospitalización.
    • Complicaciones durante el tratamiento.

Procedimiento de Recolección de Datos

Se recopilaron los datos retrospectivamente de los registros clínicos electrónicos y físicos del hospital. Se garantizó la confidencialidad de los pacientes mediante la anonimización de los datos.

Análisis Estadístico

  • El cálculo del tamaño de la muestra de la cohorte no expuesta (cohorte B) se ajustó para garantizar un equilibrio que tenga en cuenta el tamaño fijo de la cohorte expuesta (cohorte A).
  • Dado que el grupo de la cohorte A se conformó exclusivamente por mujeres que sufrieron violencia de género, el grupo B fue seleccionado dentro del grupo de pacientes mujeres que cursó internación en la Unidad de Quemados desde el 2014 hasta la actualidad.
  • Se utilizó una técnica estadística de muestreo aleatorio simple para minimizar el sesgo de selección y asegurar que la muestra sea representativa de la población total.
  • Se realizaron comparaciones entre las cohortes A y B utilizando el test de Chi-cuadrado para variables categóricas y el test T de Student o U de Mann-Whitney para variables continuas, dependiendo de la normalidad de los datos.
  • Un análisis multivariante se llevó a cabo para identificar factores independientes asociados con quemaduras por violencia de género.

Protocolo de Manejo de Víctimas de Violencia de Género en el Hospital de Emergencias Dr. Clemente Álvarez

En el Hospital de Emergencias Dr. Clemente Álvarez, cualquier paciente que refiera ser víctima de violencia de género, en cualquier nivel o área de atención, se registra en un sistema específico destinado para este fin, y se notifica a la línea 144, que ofrece asistencia y orientación para mujeres en situación de violencia.

Además, el hospital sigue el Protocolo de Actuación de Hospitales Municipales de Rosario para la atención de mujeres víctimas de violencia, que incluye los siguientes pasos: recepción de la víctima, anamnesis y evaluación física, realización de estudios complementarios y tratamientos necesarios, administración de un kit de medicamentos para la prevención de enfermedades infectocontagiosas y embarazo en casos de agresión sexual, apoyo del equipo de salud mental, intervención de un médico policial si es necesario para la toma de muestras, resguardo de la víctima dentro de la institución o derivación a un hogar de tránsito, y notificación al destacamento policial correspondiente.

Resultados

Se incluyeron un total de 53 pacientes, de los cuales 27 (50.9%) correspondieron a casos de violencia de género y 26 (49.1%) a quemaduras sin contexto de violencia de género. Los datos resumidos se encuentran en la tabla en el segmento Anexo.

Las quemaduras se distribuyeron principalmente en el rostro, cuello, tórax y extremidades superiores. La cohorte de pacientes con violencia de género presentó una mayor proporción de quemaduras en el cuello (14.4% vs. 11.5%), tórax (14.4% vs. 11.5%), y abdomen (8.2% vs. 4.9%) en comparación con la cohorte sin violencia de género. Sin embargo, estas diferencias no fueron estadísticamente significativas (p > 0.05 para todas las comparaciones).

La cohorte de pacientes con violencia de género presentó una mayor proporción de pacientes en los grupos de gravedad III y IV en comparación con la cohorte sin violencia de género (48.1% vs. 3.8% para el grupo III, y 29.6% vs. 0% para el grupo IV). Esta diferencia fue estadísticamente significativa (p = 0.00099).

Se encontró que el uso de combustibles asociados fue más común en la cohorte de violencia de género (40.7% vs. 15.4%), aunque esta diferencia no alcanzó significancia estadística (p = 0.081). El mecanismo de lesión principal en ambas cohortes fue el fuego.

En cuanto a las complicaciones, el 48.1% de las pacientes con violencia de género presentaron complicaciones durante el tratamiento, en comparación con solo el 11.5% de las pacientes sin violencia de género (p = 0.006), lo que sugiere una asociación significativa entre la presencia de violencia de género y un mayor riesgo de complicaciones.

Se realizó un análisis de regresión logística para evaluar si las variables como la distribución anatómica de las quemaduras, grupo de gravedad, tipo de quemadura, días de internación, y uso de combustible podían predecir la probabilidad de que un paciente sufriera quemaduras en el contexto de violencia de género. El modelo no mostró poder predictivo significativo (AUC-ROC = 0.48), y las variables incluidas no fueron suficientes para predecir de manera confiable la violencia de género en esta población.

Discusión

El presente estudio examinó las características clínicas y demográficas de pacientes con quemaduras en el contexto de violencia de género, comparándolas con aquellos pacientes con quemaduras sin dicha asociación. A pesar de que se observó una mayor proporción de quemaduras en áreas críticas como el cuello, tórax y abdomen en la cohorte de violencia de género, estas diferencias no fueron estadísticamente significativas, lo que podría estar relacionado con el tamaño limitado de la muestra.

Un hallazgo relevante fue la asociación significativa entre la gravedad de las quemaduras y la presencia de violencia de género. Las pacientes en contextos de violencia de género tenían más probabilidades de pertenecer a los grupos de gravedad III y IV, lo que sugiere una mayor severidad de las lesiones en este grupo. Esto coincide con estudios previos que señalan que la violencia de género a menudo resulta en lesiones más graves y extensas.

El uso de combustibles asociados, aunque más prevalente en la cohorte de violencia de género, no alcanzó significancia estadística, lo que puede indicar que, si bien es un factor de riesgo, no es un predictor independiente en esta muestra. El análisis multivariante realizado no logró identificar un conjunto de variables que pudieran predecir eficazmente la violencia de género, lo que sugiere que la complejidad de estos casos puede requerir un enfoque más holístico o la inclusión de variables adicionales no consideradas en este estudio.

La violencia de género como mecanismo lesional (ML) adquiere relevancia debido a varios factores clave. En primer lugar, existe un riesgo significativo de subdiagnóstico, muchas veces relacionado con la negación del episodio tanto por parte de la víctima como de su entorno, lo que puede llevar a múltiples ingresos hospitalarios antes de que se identifique la verdadera causa. Este subdiagnóstico no solo dificulta la intervención temprana, sino que también impide la implementación de medidas preventivas adecuadas.

La violencia de género también es un factor altamente prevenible cuando se realiza un diagnóstico preciso, lo que subraya la importancia de mantener un alto índice de sospecha, especialmente en casos donde las quemaduras ocurren en el domicilio y cuando existen discrepancias entre el relato del suceso del paciente y de los acompañantes. La asociación de quemaduras por fuego en el domicilio es un indicador que, junto con las diferencias en los relatos, debería alertar a los profesionales de salud sobre la posibilidad de estar ante un caso de violencia de género.

Además, la elevada gravedad y las secuelas que caracterizan a las quemaduras asociadas a violencia de género enfatizan la necesidad de un enfoque integral que aborde tanto las heridas físicas como las implicancias psicológicas y sociales. La falta de evidencia científica específica sobre la relación entre violencia de género y quemaduras resalta la urgencia de realizar más investigaciones que puedan contribuir a una mejor comprensión y manejo de estos casos.

Estos resultados subrayan la necesidad de un enfoque multidisciplinario en el manejo de pacientes quemadas en contextos de violencia de género, que incluya no solo la atención médica inmediata sino también la intervención psicológica y legal. Futuras investigaciones con muestras más grandes y la inclusión de variables adicionales podrían ayudar a desarrollar modelos predictivos más robustos, mejorando así la identificación temprana y el manejo de estos casos.

Conclusiones

Existe una asociación clara entre la gravedad de las quemaduras y la presencia de violencia de género, con una tendencia hacia quemaduras más graves en pacientes que han sufrido violencia de género.

Los resultados sugieren que las variables incluidas en el modelo (partes del cuerpo quemadas, grupo de gravedad, tipo de quemaduras, días de internación) no son suficientes para predecir de manera confiable la violencia de género en los pacientes quemados.

Este estudio resalta la importancia de considerar la violencia de género como un factor crítico en la evaluación y tratamiento de pacientes quemadas, especialmente dado el aumento significativo en la gravedad de las lesiones observadas en este grupo. A pesar de las limitaciones, los hallazgos proporcionan una base para futuras investigaciones orientadas a mejorar los protocolos de atención para esta población vulnerable.

Es crucial que los profesionales de salud mantengan un alto índice de sospecha en situaciones donde las quemaduras han ocurrido en el domicilio y cuando hay inconsistencias en los relatos del suceso. El reconocimiento temprano de la violencia de género como un posible mecanismo lesional no solo facilita un diagnóstico más certero, sino que también permite implementar intervenciones preventivas que podrían reducir la gravedad de las lesiones y sus secuelas a largo plazo. La evidencia científica en este campo es limitada, y se requieren más estudios para optimizar los protocolos de atención y asegurar un manejo adecuado y efectivo de estos casos.

Bibliografía

1. Kuupiel D, Lateef MA, Pillay JD, Mchunu GG. Mapping global evidence on injuries/trauma dueto sexual and gender-based violence for research prioritisation and development of guide lines to mitígate their impact: A scoping review protocol. Systematic Reviews. 2023;12(167). doi: 10.1186/s13643-023-02345-8.
2. Epidemiology, risk factors, and prevention of burn injuries. Up To Date.
3. Ministerio de las Mujeres, Géneros y Diversidad de la Nación. Datos públicos para infografía enero – junio 2023. Dirección Técnica de Registros y Bases de Datos. Disponible en: https://www.argentina.gob.ar/generos/linea-144/informacion-estadistica.
4. Argentina. Ley de protección integral para prevenir, sancionar y erradicar la violencia contra las mujeres en los ámbitos en que desarrollen sus relaciones interpersonales, Ley 26.485. Boletín Oficial de la República Argentina. 2009. Disponible en: https://www.argentina.gob.ar/normativa/nacional/ley-26485-146016.
5. Santa Fe (Provincia). Ley de Protección Integral para Prevenir, Sancionar y Erradicar la Violencia contra las Mujeres. Ley Provincial No 13.348 (2013). Decreto Regl. 4028/13. Santa Fe, Argentina. Sanción: 30-05-2013, Publicación: 29/07/2013.
6. Santa Fe, Rosario. Ordenanza municipal de Rosario No 9056 (2013) Sistemas de Dispositivos de Alerta para Mujeres Agredidas (DAMA). Boletín Oficial Municipal Electrónico No311 (24).
7. Borràs Cuevas B, Andreu Mondon J, Monroy-Parada DX. Detección de violencia de género en mujeres jóvenes que acuden a un centro de atención primaria. Atención Primaria. 2023;55(102524). doi: 10.1016/j.aprim.2022.102524.

Anexo

Tabla 1: Resumen de características de la población estudiada.
Referencias: D.E.: desviación estándar; SCQ: Superficie corporal quemada;
UQ: Unidad de quemados.

6 junio, 2025